El diseño industrial, como muchos otros sectores creativos que otorgan servicios, está en constante evolución y creación, ajustándose a las nuevas necesidades de la sociedad.
Sin embargo, este proceso continuo, muchas veces culmina en la generación de residuos que no se aprovechan. Hoy vamos a hablar del reciclaje y la reutilización en el diseño.
Partimos del punto de que el diseño industrial es una de las herramientas más potentes para conseguir implementar cambios en la sociedad a través de nuevos productos que introducen nuevas prácticas. Gracias al diseño podemos, desde mejorar el proceso de creación de un elemento, con una mayor eficacia en las plantas de producción, hasta facilitar la reutilización y el reciclaje en el final del ciclo de vida de un producto, eligiendo de manera minuciosa los materiales y el ensamblaje que conlleva.
Sin embargo, también nos situamos en una era en la que la reutilización es crucial, intentando evitar la generación de desechos descontrolados que empeoran la crisis climática actual. Es por ello tan importante considerar los nuevos materiales y mirar y prestar atención a los investigadores y pioneros que tenemos a nuestro lado, y que descubren nuevas maneras de aprovechar residuos o materias que nunca antes habíamos considerado.
Pensar antes de tirar
La creación de nuevos materiales comienza en mirar con buenos ojos a los residuos producidos en las ciudades, provenientes de sectores como la construcción, repletos de materiales como vidrios, hormigón, piedra, ladrillos, cemento, porcelana o cerámicos; y también otros muchos tipos de desechos que proceden de otros sectores, como los plásticos, envases, redes de pescar, telas, cueros, otro tipo de textiles, corchos, papel, piezas de equipos obsoletos…
Hay infinidad de residuos que se pueden reutilizar pensando cómo hacerlo. Una vez identificados estos residuos, hay que pensar cómo se pueden aprovechar. Existen ya muchos esfuerzos puestos en esta misión, que descubren la tecnología necesaria para poder crear nuevos productos que procedan de la reutilización de otros.
Desechos y tecnología: la combinación perfecta
A través del uso de la tecnología correcta, se pueden transformar materiales existentes en nuevos recursos para la creación de productos, sin generar residuos extra e innecesarios. Además, es una forma de poner el foco en el uso de materias locales, en lugar de proyectar necesidades al extranjero y generar más gastos y residuos por largos transportes. De esta forma se cierran los círculos de producción y consumo. Vamos a ver algunos ejemplos reales.
/Mortero sostenible elaborado a partir de residuos
El mortero higroscópico ha estado en voz de todo el sector de la construcción y el diseño, y ha protagonizado la circularidad de los materiales en España. Se trata de un material fabricado a partir de materiales de origen local en Mallorca. Está compuesto en un 85% con fragmentos de cerámicos reciclados y un 15% de cementos blanco para estabilizar. El producto generado tiene propiedades de drenaje, ayudando a que filtre el agua y reduzca la humedad de la atmósfera, y una alta resistencia que permite que sea apto para construcción y edificación.
Las aplicaciones del material resultante se manifiestan como pavimentos para zonas peatonales y de tránsito rodado no motorizado, áreas verdes, y como una opción sostenible para el asfalto de las ciudades. Gracias a sus propiedades de drenaje permite que el agua vaya drenando de forma natural de vuelta a la tierra. El objetivo del desarrollo de este proyecto es conseguir crear un nuevo material reutilizando residuos, en este caso ded cerámica, de origen local, consiguiendo así reducir enormemente la huella de carbono.
Gracias a las propiedades de drenaje de estos materiales y a otras actuaciones se evitan inundaciones. Lo comento por si se considera oportuno meterlo.
Este es un proyecto potenciado por Loop Disseny, una plataforma que fomenta el desarrollo de proyectos de carácter sostenible, con equipos multidisciplinares, con el fin de favorecer las conexiones entre empresas y sensibilizar sobre la circularidad.
/Residuos de celulosa para elaborar materiales sostenibles
La innovación, investigación y tecnología nos permite hablaros de otro material realizado a partir de la reutilización de residuos, en este caso, de celulosa. Se trata de Honext®, un material completamente natural desarrollado en España a través de residuos de celulsoa. Está totalmente enfocado a su reciclado posterior, y cuenta con unas altas prestaciones que lo convierten en un material ideal para la construcción.
El proceso de elaboración de este material parte de la identificación y clasificación de los diferentes residuos de celulosa, según su composición. De esta forma se genera la materia prima y se asegura una alta calidad y unas propiedades consistentes en todo momento. El siguiente paso consiste en un tratamiento enzimático de origen natural que sirve para procesar la celulosa, generando uniones más estableces que otorgan propiedades mecánicas al material. Posteriormente, se mezcla con aditivos sostenibles y se prensa, conformando el tablero, a falta de ser secado. Este último paso de generación del Honext®, consiste en evaporar el agua mediante calor y aire.
Este material está diseñado para ser completamente reciclable y volverse a unir al final de su vida útil al proceso de generación de más tableros, siendo totalmente circular. Gracias a sus propiedades de no toxicidad, aislamiento acústico, aislamiento térmico, resistencia a la humedad, resistencia a la flexión y ligereza, es un material válido para interiores y revestimientos.
/Posibilidades infinitas con plásticos desechados
Sin duda, el plástico reciclado es el material en el que mayor número de empresas ponen el foco para desarrollar productos sostenibles. En 2022 se han registrado entre 75 y 199 millones de toneladas de plástico contaminando los océanos que potencialmente se podrían reciclar y reutilizar con el trabajo, investigación, innovación y puntos de vista correctos. Sin embargo, solo un 9% de los desechos consigue reciclarse.
El potencial que tiene la reutilización del plástico a través de los procesos adecuados es infinito. Cada vez más empresas lanzan colecciones dentro de su sector, ya se la moda, informática, construcción… de productos realizados con restos no compostables de los océanos. Hoy os vamos a enseñar algunos de los proyectos que más destacan en este sector.
Microsoft lanzó en a finales de 2021 un ratón fabricado con plástico procedente de los océanos, en un grito a la llamada huella de carbono negativa. Aunque este componente electrónico cuenta únicamente con un 20% de plástico reciclado en su carcasa, quedando aún lejos de otros proyectos, supone un gran cambio para la empresa, iniciando un cambio hacia la sosteniblidad en su corporación. Hasta la fecha, los packaging de sus productos eran plásticos de un solo uso, y tras la realización de este, han desarrollado envases de papel y cartón, apostando por la sostenibildiad, competitividad y desarrollo de la empresa.
Otro gran contaminante de los océanos son las redes de pescadores que se pierden en las profundidades, y que están fabricadas en Nylon, de forma que no se pueden biodegradar, sino que permanecen hundidas y perdidas durante años. Sin embargo, grandes comunidades en países como Filipinas, que se dedican a la pesca como medio de vida, han juntado sus fuerzas y se han volcado en la búsqueda de estas redes para su reciclaje. Uno de los principales fines es para la creación de nuevos productos a partir del nylon de las redes de pesca.
Aquafil es una empresa que se dedica a este proceso, que consiste en regenerar las fibras de Nylon y convertirlo en un nuevo material con unas propiedades de alta calidad y presentaciones: Econyl®. Uno de los productos protagonistas creado con este material son alfombras que parecen piezas de arte para decorar las casas. Estas alfombras están creadas con una composición total de fibras de Econyl®.
Existen otras muchas propuestas que abordan el consumo del reciclaje y la reutilización de los plásticos y que abarcan sectores como la moda, el interiorismo, el diseño industrial o el packaging, empleando tanto materiales totalmente reciclados como nuevos biomateriales que ayduan a sustituir el consumo de los plásticos y que os contaremos más adelante.
¿Cómo reaprovechar los residuos del sector textil?
Otro sector contaminante es el textil, no solo por su producción que crece exponencialmente año tras año, sino también por su reciclaje, ya que la ropa desechada acaba formando grandes montañas de residuos, debido a que la cadena de producción de este sector crece más rápido que la de su reciclaje. Si bien es cierto que la ropa en entornos domésticos tiene ciclo de vida muy circular, hay prendas que acaban en la papelera y sin reciclar correctamente, por la falta de conocimiento del reciclaje del sector textil. Además, a esto hay que sumar las empresas que producen moda siguiendo las tendendcias fugaces, y que no incluyen procesos de reciclaje adecuados a su cadena de producción. Se estima que el 70% de los desechos textiles puede ser reciclados con un proceso de clasificación correcto. Sin embargo, a día de hoy solo un 2% se recicla ya que es un sector en el que todavía hay que poner muchos esfuerzos para llegar a la tecnología adecuada. Hay iniciativas para luchar contra esta crisis medioambiental, que buscan la manera más efectiva de utilizar esos desechos para crear nuevos materiales. Aún así, las bases para lograr un avance significativo son la colbaoración abierta y la inversión en investigación y medios.
Recover es una empresa española fundada en 2006, que se didica al reciclaje de fibras procedentes de los desechos textiles para generar nuevos materiales para la producción de ropa, cerrando así el circulo de producción de esta industria. En 2014 despegó con su propio proceso de reciclaje a nivel mundial. Este proceso consiste en cortar grandes piezas de material en pequeños fragmentos de los que se eliminan aquellos que no son puramente textiles de forma automatizada. Estos fragmentos se someten a tratamientos con bajo consumo de agua y energía y sin componentes químicos contaminantes, para formar las bobinas de te tela de material que después se tejerán, listas para embalar. Producen algodón 100% reciclado en un proceso que ahorra emisiones de carbono y consumo de energía y de agua en hasta 14.000 L por KG.
Los residuos de la madera funcionan como recurso
Muchos objetos de madera tanto de uso cotidiano como industrial terminan su vida útil siendo desechados, cuando en realidad existen muchas iniciativas para su reutilizaciómo comor recurso y nuevo material. El mayor incoveniente al que nos enfrentamos con el consumo de madera es la tala de árboles y eliminación de flora y fauna de los ecosistemas. Uno de los procesos más conocidos es el reciclaje de la madera para generar nuevos tableros, prologando su circulación y favoreciendo la transición ecológica. Estos tableros son mucho más baratos y fáciles de producir, ahorrando en el proceso de secado, utilizando las astillas de mayor calidad para los propios tableros y las de menor calidad como fuente de combustible fósil.
Existen otros proyectos que van más allá con un carácter más innovador, como el de Tamara Orjola, diseñadora rusa que ha investigado sobre el aprovechamiento de las agujas que se generan y desechan de la tala de las coníferas. Estos suponen entren un 20 y 30% de la masa total de la tala y no se llegan a emplear en ningún proceso. En esta investigación Tamara concluye que se trata de un recurso idóneo para generar numerosos tipos de fibras que pueden servir tanto para textiles como composites o fibras para producción de objetos… El proceso requiere primero de triturar en pequeños fragmentos todas esas agujas para después someter el conjunto a agua y secado, seguido de un prensado para obtener un material seco y rígido que puede convertirse en probetas o bobinas de hilo.
El resultado es un material de mucha belleza que se puede utilizar tanto para piezas de decoración, como alfombras o paneles acústicos para oficinas, como asientos u otro selementos decorativos.
Vemos que existen numerosos desechos que proceden de productos que dejamos de utilizar y acaban formando parte de los ecosistemas, contaminando. Sin embargo, hemos visto que existen numerosas formas innovadoras de poder reciclar todos estos desechos creando materiales que son tendencia en el diseño.